Qué es el Reiki

Reiki significa Energía Vital Universal, todos nosotros estamos constituidos por ella y todos podemos usar esta energía para ayudar a sanar.

Reiki es un nombre japonés formado por dos silabas: "Rei", la energía universal de la que surge la vida, lo que está por detrás de todo, lo que ves, el Espíritu creador, el hálito de vida. Y "Ki", la energía propia, la fuerza vital tal como se manifiesta en nuestro cuerpo físico.

Entonces Reiki sería la comunicación, el restablecimiento o conexión de nuestra energía con la fuente de la vida, un reequilibrio, una revitalidad y una armonía con la naturaleza.

Reiki es la canalización y transmisión de esta energía mediante la imposición de manos.

Cuando una emisora de radio transmite no hay conexiones entre la emisora y tu casa, sin embargo, cuando enciendes el receptor y sintonizas la emisora, recibes lo que están emitiendo.

Los principios son los mismos con Reiki. Estas frecuencias de sanación viajan a través del espacio y sabemos que podemos contactar con esta gran fuerza. Una vez que hacemos contacto, la energía fluye automáticamente. Es universal e ilimitada. Cuando quieras parar, sólo hay que retirar las manos, es así de simple.

A esta energía se le han dado diversos nombres: Poder Divino, Energía Cósmica, Fuerza Vital Universal, Ondas Radiónicas, Ondas Etéricas, Prana, Maná, Chi, Orgone, Ka, Pneuma, magnetismo animal, Espíritu Santo,...

Sea cual sea el nombre que se le dé, esta fuente de vida contiene los recursos y las cualidades capaces de restaurar el equilibrio en tu vida. Es la fuerza que conserva la matriz de todo aquello que genera no solo al ser humano, sino a todo lo que tiene vida en nuestro planeta y en el universo.

Para muchas culturas, así como para los biofísicos actuales, este principio de vida es un fenómeno de luz, por ejemplo, entre otros muchos descubrimientos, las investigaciones han permitido observar que el encuentro de un espermatozoide con un óvulo provoca una emanación luminosa.

El Reiki es conectar con la armonía del universo, con la inteligencia creadora que hay detrás de todo lo creado, es la luz que reequilibra, distiende, relaja, ayuda a la autosanación, da comprensión, protege, nos libera de miedos y nos acoge. Recibir Reiki es comprender que no estas separado de la existencia.

El Reiki está más allá del ego y de la voluntad individual, te ayuda a ir con la corriente de la vida, a desprenderte del miedo y de la resistencia que nos enferma.

El Reiki es un sistema natural de curación. No una religión. El don que nos legó Mikao Usui es el de haber creado una herramienta accesible a cualquier persona. Es simple y natural. No hay magia en ello, ni brujería, tampoco es necesario crear un estado de conciencia especial para trabajar con ella. Reiki trabajará automáticamente cuando las manos se colocan en la zona que lo necesita.